lunes, 5 de noviembre de 2007

NOCHE EN AZORÍN

Era una noche lluviosa de enero de 2000 en Móstoles. Las calles estaban completamente vacías y hacía un frío descomunal. El viento gélido de la noche golpeaba con fuerza las ventanas de la casa de mis primos. Mientras, en el interior, mi primo Adri, mi hermana Lara y yo, jugábamos con la playstation. Entonces, se oyeron fuertes rayos y truenos procedentes de la tempestad pero ninguno de nosotros le dimos mucha importancia. De repente, se apagaron todas las luces de la casa. Nos sobresaltamos y protestamos porque tambien se había apagado la playstation justo y cuando estábamos apunto de terminar la partida.

- ¿Y ahora que hacemos?-preguntó Lara-.

- ¿Eh?-sugirió Adri- ¿Y si contamos historias de miedo?

- ¡Vale!

Estuvimos largo tiempo contando historias de miedo y lo estábamos pasando muy bien. Pero entonces, un ruido procedente de una de las habitaciones nos sobresaltó.

- ¿Qué es eso?- pregunte yo-.

- No será nada; sigamos jugando.

Sin embargo, aquel ruido se volvió a repetir y cada vez más rápidamente.

- ¿No será que está tu madre en casa?

- No, si se fue a comprar con mi padre y mis dos hermanos. Yo mismo la vi.

Mientras tanto aquel ruido no paraba de sonar y nosotros cada vez estábamos más y más asustados. Lara cogió el teléfono pero estaba sin línea. Ya no sabíamos que hacer. Ninguno de nosotros se atrevía a ver qué o quién provocaba ese ruido incesante. Pero entonces paró. Parecía que la pesadilla había acabado. En ese instante, se oyeron pequeños pero decididos pasos hacia el salón. Nos estremecimos y nos apiñamos en el sofá. Una mano abrió la puerta y nosotros gritamos. Por la carencia de luz no se veía bien pero quién abrió la puerta parecía tener una capa y algo punzante en la mano. Cuando lo vimos, gritamos aún más y entonces... aquella cosa gritó tambien. Al verle el rostro, nos dimos cuenta de que era Iván, mi primo pequeño.

- ¿Pero qué haces tú aquí?- dijo Adri-.

- ¿Yo? Yo estaba durmiendo en mi habitación.

- ¿ Y se puede saber por qué hacías esos ruidos? - preguntó Lara-.

- Es que me estaba dando contra la pared todo el rato y como no podía dormir cogí mi manta y vine aquí con vosotros, que parecía que os lo estabais pasando bien...

Nos llevamos un susto terrible pero, por suerte, todo acabó bien.

2 comentarios:

Jack Redfield dijo...

jajaja muy buena la historia de miedo.

Ahora vamos al tema del caramelo personificado, ¿Qué te parece si hago lo que planeamos en ingles, la historia del espejo pero con variacion caramelesca incluida? xD.

Te veo mañana

[[ . * Ro * . ]] dijo...

Jajajaa que cabroncete el primo pequeño xDD


Muy bien mi niña!


Me voy a ver si estudio algo de CC que voy como el culo...En fin...Aunque...PARECE QUE YA ME SE EL ALFABETO GRIEGO!Seeee jajajaa



Un pedazo de beso!Hasta mañana =)